Mejor Manolo
Autora: Elvira Lindo
Editorial: Seix Barral
ISBN: 978843214561Páginas: 183
Sinopsis
Manolito Gafotas ya no es un niño que juega en el parque de Carabanchel Alto. Manolito ha crecido y, en su preadolescencia, nos cuenta todas las anécdotas que han ido sucediendo en su vida desde la última vez que le encontramos: especialmente, nos cuenta cómo han cambiado las cosas tras la llegada de una nueva hermana. “La Chirli”, y todo lo que la rodea, será el nuevo eje a través del que conoceremos las preocupaciones y vivencias de aquel pequeño travieso que encandiló a millones de lectores.
Reseña de Rustis
Manolito
ha crecido.
¡¡Qué
pena!!, dirán algunos. Pero no. Manolito ha crecido para bien. Ha
crecido para dejarnos claro que, pese a que ya no es un niño pequeño
de barrio, conserva su extraordinaria personalidad y esa voz tan
característica que nos hizo enamorarnos de él.
La
vida de Manolito Gafotas fue, durante años, relatada con enorme
éxito por Elvira Lindo en la radio y en varios volúmenes que
pasaron a formar parte esencial de la historia de la literatura
infantil y juvenil de nuestro país. Ahora, con este nuevo libro, no
solamente crece el personaje; el tiempo ha dado un giro a la trama,
al tono en que se cuenta, incluso en ocasiones al propio lenguaje y
al formato editorial. Las aventuras de Manolito han sido desde
siempre patrimonio tanto de niños y jóvenes, como de adultos; pero
es en esta ocasión cuando se ha hecho una apuesta por incorporar
ciertos detalles que traspasan el estricto ámbito de la infancia.
Puedo afirmar rotundamente que este Manolo de ahora ya no es alguien
que cabe en el ámbito de la LIJ. Aunque quizá sean, esta vez,
algunos niños y jóvenes con mayor hábito de lectura, quienes
«roben» esta historia de la mesilla de noche de los adultos.
Manolito
sigue siendo un héroe de barrio. Conserva su especial sabiduría
popular, su ingenuidad a prueba de fuego, y su traviesa pero honrada
naturaleza. Pero Manolito ha crecido, y en su muy reconocible voz, se
aprecia ahora la entrada de una suerte de nostalgia, de melancolía;
ese estado en que nos encontramos cuando vamos abandonando nuestros
mundos infantiles y comenzamos a ver cambiar las cosas a nuestro
alrededor.
De
todas formas, y quede claro, continuamos riéndonos con él. El humor
sigue siendo parte esencial de la naturaleza de nuestro flamante
Manolo. Un humor al alcance de todos los lectores, un humor cercano,
inteligente, en el que están ausentes los chistes fáciles y las
bromas de mal gusto, y lo que queda es esa forma de observar la
realidad que deja siempre un buen sabor de boca. Al final, el humor
que imprime Elvira Lindo a su personaje, es el de la autenticidad,
ese que nos hace pasar de la risita nerviosa a la carcajada, porque
nos revela que un personaje de ficción puede ser una auténtica
fotocopia de nosotros mismos. Todos somos o hemos sido tan parecidos
a Manolito que, claro, su autora no podía permitirse alejarnos de él
solamente porque los años hayan pasado.
Lo
más sorprendente del caso es que el tiempo ha hecho madurar al
héroe, aunque sólo lo suficiente para no resultarnos aburrido y
para conservar su ternura e ingenuidad. El cambio que se nos da es
que alguna que otra lagrimilla puede asomar a nuestros ojos, porque
en la nueva preadolescencia de Manolo, la ya citada ternura sube de
nivel, y se subraya y sobredimensiona la calidad humana de los
personajes; una visión auténtica, verdadera, cercana y amorosa de
la familia popular española.
Elvira Lindo |
Como
en la vida misma, la risa y la lágrima se unen, pero en su justa
dimensión. Ni mucho ni poco de cada una de ellas. Mejor
Manolo
es una novela para todos los públicos, que puede decirnos algo
interesante o esencial a todos, que nos entretiene y enternece a
todos, que nos hace sentir que los héroes populares existen y que
podemos encontrárnoslos por la calle. Cada vez que uno de nosotros
dice eso de «el mundo mundial» o «científicos de todo el mundo»,
pasa a formar parte de una gran comunidad de lectores. Y eso
solamente ocurre con los grandes personajes y las grandes historias.
Que nadie es indiferente a ellas. Como cada vez que algo nos evoca
una frase de El
Principito,
o una ocurrencia de El
pequeño Nicolás.
Héroes vivos, del día a día. Como cada uno de nosotros.
No me acabo de animar con esta autora.
ResponderEliminarEn casa había/hay varios libros de cuando mi hija era pequeña y nunca se me ocurrió leerlos. Ahora tamipoco me termino de animarme con esta versión más dirigida a los adultos. Besos.
ResponderEliminarAún tengo que estrenarme con este personaje...
ResponderEliminarBesotes!!!
Fíjate que me gusta Elvira Lindo, pero nunca he leído a Manolito Gafotas... Me parece una escritora tan cercana y lúcida, con una habilidad tremenda para provocar precisamente eso: una lagrimilla entre sonrisas.
ResponderEliminarBesos