Perdida

lunes, 28 de octubre de 2013

Perdida
Autora: Gillian Flynn
Editorial: Mondadori (Roja & Negra)
ISBN: 9788439726821
Páginas: 576


Reseña de Rustis

Después de casi un año leyendo críticas sobre esta novela, las expectativas eran tan altas que, sinceramente, comencé la lectura un poco desmotivada. Porque siempre me sucede que, cuanto más le gusta un libro a la gente, menos me gusta a mí, y no esperaba menos en este caso.

Pero para mi sorpresa, Perdida me ha impactado muchísimo más, incluso, de lo que yo misma me habría imaginado. Me interesó desde el inicio, especialmente, el uso de la narración a dos voces. Nick y Amy, el matrimonio protagonista, van relatándonos su historia de forma intercalada; ella comienza a través de su diario personal. Él, sin embargo, es el encargado de ubicarnos en el centro de la trama: la desaparición de su esposa el mismo día en que ambos cumplen cinco años de casados. ¿Dónde está Amy? Esta es la pregunta que a partir de entonces genera todos los acontecimientos.

Considero que la dificultad de narrar de esta forma dual era grande, pues a medida que nos vamos adentrando en la historia, descubrimos paso a paso no sólo la investigación centrada en la búsqueda de una mujer perdida, sino especialmente, las personalidades de ambos protagonistas. Y esto no es fácil de lograr, porque estamos hablando de un hombre y una mujer y, aunque probablemente haya quien no esté de acuerdo, acertar a la hora de elegir el tono, vocabulario, pensamientos y carácter de personas de diferente sexo, no es algo que se consiga así, sin más. Creo que Gilliann Flynn acierta plenamente a la hora de plasmar cada una de las dos voces que se dan cita en el relato, hasta el punto de que antes de la mitad de la historia, tenemos una idea bastante clara de quién es cada uno de ellos. Les conocemos y participamos intensamente de su vida. Incluso alternamos, al tiempo que la escritora alterna las palabras de cada uno, nuestra opinión sobre ellos. Constantemente sentimos la necesidad de “defender” como espectadores a uno u otro; todo depende del momento en que se sitúe la trama, puesto que la autora se muestra como una auténtica maestra a la hora de relatar dejando muy sutilmente, muy poco a poco, pistas o mini-resoluciones de alguno de los conflictos de este matrimonio. La intriga, de principio a fin, está asegurada.

Aun así, no es posible afirmar que Perdida sea una novela policíaca, de detectives, o negra. No parecen calificativos que se le asemejen, en tanto la mayor parte de la historia se centra, como ya he indicado, en indagar en la personalidad de Nick y Amy y en las circunstancias que, desde el inicio, han rodeado su matrimonio. Como mucho, podría ser calificada de thriller psicológico -más de lo segundo-, de manera que recogiéramos tanto el misterio y la indagación que dan lugar a la trama, como ese interés continuo por mostrar desde dentro, y muy detalladamente, los caracteres de los protagonistas. Es cierto que en la novela se dan cita muchos otros personajes, que actúan como acompañamiento -en positivo o en negativo- del matrimonio, pero ninguno de ellos aparece tan específicamente caracterizado. Sí es cierto que todos, en buena medida, son parte de la historia, pues cada uno a su manera ha jugado un papel determinante en la vida de la pareja. Esto es especialmente visible en el caso del padre de Nick -fuente de su personalidad inquieta y cobarde-, así como en los padres de Amy quienes, desde su pose de grandes psicólogos, famosos por sus libros basados lejanamente en la vida de su hija, han sido sin duda los causantes de profundos traumas que son la base pasada que explica los problemas de la chica.


Ben Affleck y Rosamund Pike, posibles
protagonistas de la película sobre Perdida


Este conflicto interno central está, además, perfectamente contextualizado: con la crisis mundial y el paro como fundamento socioeconómico de la situación de este matrimonio, y con el relato también bastante detallado de cómo la sociedad que rodea a Nick y Amy actúa frente a ellos de una forma muy cruel, pero muy real: prejuicios, aislamiento, desconfianza, falsas apariencias, amistades “de pega”, medios de comunicación crueles y hasta abogados de éxito. Son ingredientes muy usuales en las novelas de misterio, pero que aquí están solamente al servicio de Nick y Amy como personajes: son una mera comparsa contextual que justifica el avance del relato, pero que no distrae de nuestro objetivo: alcanzar a conocer y comprender las actitudes, cada vez más extrañas, de Nick y Amy.

En conjunto, la novela atrae porque asegura el misterio, la búsqueda de respuestas y la intriga necesarios en el género del thriller; pero engancha, sobre todo, porque nos pone frente a una pregunta sobre la que, probablemente, muchos de nosotros no hemos reflexionado nunca. ¿Se conoce verdaderamente un matrimonio? ¿Es posible que ambos vivan engañándose mutuamente? Y no hablo de engaños a la manera de infidelidades, solamente. Hablo de algo mucho más inquietante, y que nos va causando escalofríos a lo largo de todo el relato.

¿Conoces de verdad a tu marido, a tu mujer? ¿Crees que él/ella podría ser un criminal?


Reseña de Mustis

¿Cómo reseñar un libro del que no puedes contar prácticamente nada? Porque, si algo tiene Perdida, son giros, cambios y sorpresas que hacen que el lector se sienta como en un tiovivo dando vueltas a gran velocidad.

Dividido en tres partes, se dedican capítulos alternos a Nick y a Amy, los dos componentes del matrimonio
que queda roto tras la desaparición de Amy. Al principio, Nick nos cuenta lo que va ocurriendo desde que su mujer desaparece, y en los capítulos de Amy leemos extractos de su diario desde el día en que se conocieron. Acabada la primera parte, la historia da un giro total, Gillian Flynn nos deja con la boca abierta y hace que nos mantengamos mucho más alerta hasta el final del libro. Y creo que, sobre lo que sucede, no se puede contar más.

Si tuviéramos que describir este libro de alguna manera diría que es una radiografía certera del matrimonio. La investigación sobre la desaparición de Amy es muy importante, sí, pero todo queda supeditado a conocer los entresijos de este matrimonio tan fuera de lo común y tan normal al mismo tiempo.

Gillian Flynn
Y es que Perdida, en su primera parte, me recordaba muchísimo a Dos en la carretera, contándonos todas las etapas por las que va pasando un matrimonio; cómo al principio todo es perfecto y poco a poco vemos los fallos donde antes no los había, aunque el amor siga existiendo. Eso sí, con mucha más mala idea que en la película de Stanley Donen (y eso que en ésta ya había para dar y tomar).

Pero, a partir del giro argumental, también nosotros nos quedamos un poco "perdidos", sin saber dónde agarrarnos ni a dónde nos va a llevar la historia. Aquí, el Dos en la carretera se ha convertido en algo mucho más negro, más ácido, y que llega a darnos un poquito de miedo, o al menos a mi me sucede así. Pero no es miedo por lo que nos están contando, sino porque en algunas actitudes o algunos pensamientos del matrimonio podríamos vernos reflejados cualquiera de nosotros (salvando las distancias). Y eso, por supuesto, no nos resulta agradable.

Junto a los personajes principales hay otros secundarios también con mucho peso en la historia, como Go, hermana de Nick, Desi, ex-novio de Amy o sus padres. Todos ellos están muy bien dibujados y nos ayudan a avanzar tanto en la investigación policial como en el conocimiento de los protagonistas, como matrimonio e individualmente.

Hay una pega que le pondría al libro, y es su final. No es que no me haya gustado, pero quizás de una historia tan potente esperaba un final que también lo fuese, y en cambio me da la impresión de que todo queda un poco diluido en la última parte. Excepto por esto, Perdida es una buenísima historia que deberíamos leer, para conocer a Nick y Amy pero también para conocernos un poco mejor a nosotros mismos, porque Gillian Flynn nos da mucho que pensar.







2 comentarios:

  1. Si es novela negra, pues no en vano lo que nos está mostrando es el lado oscuro de algunas personas. O de algunos matrimonios. Sin duda una novela muy destacable, a pesar de que algunos hayan criticado noel final sino el comienzo que es un tanto lento. Pero ¿cómo si no podríamos profundizar en el alma de ese matrimonio?

    ResponderEliminar
  2. Gracias por entrar a comentar, Pedro. La verdad es que, siguiendo tu blog, ya he visto que tienes mucho más claros que yo los conceptos de novela negra y demás... Cierto que habla del lado oscuro, pero siempre he asociado el género negro a detectives, barrios bajos, polis y demás asuntos y no me parecía tal cual. pero en cierto modo, la femme fatale "a la moderna" sí que está, así que buena observación :-)

    A mí sí que me gustó el final, la verdad. Y el inicio desde luego es más lento que el resto, pero creo que todo en su ritmo justo para ir entrando en la historia. La verdad es que poco defecto le vi yo a la novela...

    ResponderEliminar

Santa Template by Mery's Notebook © 2014