En Rustis y Mustis leen
retomamos nuestro apartado de entrevistas. En esta ocasión, tenemos
el gusto de que nos responda un escritor del que tenemos una reseña
en nuestro blog: Alejandro Navarro Yáñez, autor de El
científico que derrotó a Hitler, y otros ensayos sobre la
historia de la ciencia, publicado por Almuzara.
- Hola, Alejandro. ¿Podrías
contarnos, para empezar, qué es lo que va a encontrar el lector en
tu libro?
- Creo
que va a encontrar diversión y esparcimiento, además de
introducirse en un campo apasionante como es el de la historia de la
ciencia. A veces, a la gente le cuesta acercarse a estos temas porque
piensa que pueden ser farragosos e, incluso, aburridos. A mi juicio,
nada más lejos de la realidad. La divulgación científica puede
resultar de lo más entretenida, tanto para el que la escribe como
para el que la lee.
- En tu biografía nos dicen que
eres bioquímico y doctor en organización de empresas. Tras
trabajar durante más de veinte años como directivo internacional
en grandes compañías, ¿cómo llegas a la decisión de dedicarte a
escribir un libro como éste?
- Siempre
he sido un amante de la ciencia y de la divulgación científica.
Llevo años estudiando en el campo de la historia de la ciencia y, a
base de descubrir lo sorprendentes y entretenidas que eran muchas de
las anécdotas que han acompañado al progreso científico, pensé
que con tan solo un puñado de ellas podía escribirse un libro de
divulgación que resultase de interés para el público en general.
-Nos ha llamado mucho la atención,
además de lo amenas que son las historias, lo bien que están
explicadas. Cualquiera puede entenderlas, sean del campo científico
que sean, sin dar la sensación de tratarse de ese tipo de ciencia
inalcanzable para la mayoría de la población. ¿Has hecho un
especial hincapié en conseguir que todo nos quedara tan claro?
- Os
agradezco el comentario. Siempre tengo en mente que cuando he leído
este tipo de literatura he agradecido el que las cosas se explicasen
de una manera accesible. Hay que tener en cuenta que cuando compras
divulgación científica no estás comprando un libro de texto para
aprender una asignatura, sino que buscas, ante todo, entretenimiento
además de aprendizaje. Aunque pueda parecer lo contrario, la mayoría
de los conceptos científicos no son tan difíciles de explicar, por
lo menos a un nivel básico. Se trata de mantener el rigor sin
recurrir necesariamente a explicaciones farragosas. En este sentido,
sí que he intentado que el libro resultase adecuado para el público
en general. Para conseguirlo, mientras lo escribes debes preguntarte
si lo estarías comprendiendo tú aunque no tuvieses conocimientos
especializados en los temas de los que trata.
- Mi historia preferida es esa en la
que se descubren las vitaminas gracias a un experimento con unas
gallinas de corral. ¿Hay alguna que tú quieras destacar sobre las
demás?
- ¡Uf!.
Me cuesta mucho hacerlo. Creo que todas tienen su encanto y es
difícil elegir una por encima de las demás. Quizás, si tuviera que
decantarme lo haría por la historia de Arquímedes o la de Herón de
Alejandría. Estoy especializado en ciencia y tecnología en la
antigüedad y cuando ves los logros de estos hombres te preguntas
cómo fue posible hacer algo así en la época en la que vivieron…
- El científico que derrotó a
Hitler es un libro instructivo pero, a la vez, muy ameno. Es, a
nuestro parecer, una combinación difícil de conseguir. ¿Has
pensado alguna vez utilizar estas dotes narrativas para escribir
alguna historia de ficción? ¿O tal vez ya lo has hecho?
- De
nuevo os agradezco el comentario. Mi padre era un buen escritor de
ficción pero yo, de momento, no he escrito ninguna obra de este
tipo. No obstante, sí que he desarrollado algunas ideas y no
descarto para nada el hacerlo.
Arquímedes |
- ¿Cuáles son tus hábitos a la
hora de escribir? ¿Cómo consigues encontrar el momento para
hacerlo? Da la impresión de que tu trabajo no debe de dejarte
demasiado tiempo libre.
- Normalmente
empleo bastante tiempo en ordenar las ideas en mi cabeza y recopilar
la información que necesito. Después, cuando me veo “inspirado”,
escribo un borrador, a veces “de un tirón”, y luego lo voy
corrigiendo y completando. Escribir un libro lleva mucho tiempo, por
lo que siempre intento aprovechar los ratos libres en los que me
entran ganas de escribir. Por suerte, ahora dispongo de más tiempo
libre que antes y me cuesta menos hacerlo.
- En nuestro blog nos encantaría
conocer tus gustos literarios. ¿Cuáles son tus libros y escritores
preferidos en la actualidad, y cuáles lo eran en tu niñez?
- Sin
duda no será una sorpresa si digo que leo bastante divulgación
científica e histórica. Ficción leo menos, aunque suelo leer
algunos “best-seller” internacionales y algo de ciencia-ficción.
Ahora estoy entretenido con la novela de Joël Dicker, La verdad
sobre el caso Harry Quebert. De pequeño me gustaban sobre todo
los libros de historia y las novelas de aventuras, pero me enamoré
de la divulgación científica cuando descubrí a Isaac Asimov.
También guardo muy buen recuerdo de las novelas de Ray Bradbury y
Arthur Clarke.
- ¿Eras un buen lector en tu
infancia? ¿Te acercó alguien al mundo de los libros o fue un
camino que recorriste solo? ¿Qué recomendarías para animar a los
niños a leer?
- Sí
que leía bastante, aunque como todos los chavales de mi época lo
que más leía eran tebeos y “comics”. Como os he comentado, mi
padre era escritor, y en casa había una excelente biblioteca. Fue
este entorno familiar el que me acercó a los libros. Hoy en día las
cosas han cambiado, porque con las nuevas tecnologías los chicos se
meten pronto en internet y a veces muestran menos interés por los
libros. En cualquier caso, yo no soy pesimista. Creo que las nuevas
tecnologías ofrecen muchas posibilidades para engancharse a la
lectura, simplemente se trata de un soporte diferente. Yo
recomendaría que, cuando se interesen por un asunto, los chicos
busquen referencias en la red y consigan un buen libro sobre el tema…
¡aunque tengan que leérselo “on-line”!
- Muchas gracias, Alejandro. Ha sido un
placer que hayas accedido a responder nuestras preguntas. Desde aquí,
animamos a todos los lectores a que se compren tu libro porque,
verdaderamente, a nosotras nos ha encantado. Un abrazo.
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