Autora: Yoko Ogawa
Traductores: Yoshiko Sugiyama y Héctor Jiménez Ferrer
Editorial: Funambulista
Traductores: Yoshiko Sugiyama y Héctor Jiménez Ferrer
Editorial: Funambulista
Auténtico fenómeno social en Japón (un millón de ejemplares vendidos en dos meses, y otro millón en formato de bolsillo, película, cómic y CD) que ha desatado un inusitado interés por las matemáticas, este novela de Yoko Ogawa la catapultó definitivamente a la fama internacional en 2004. En ella se nos cuenta delicadamente la historia de una madre soltera que entra a trabajar como asistenta en casa de un viejo y huraño profesor de matemáticas que perdió en un accidente de coche la memoria (mejor dicho, la autonomía de su memoria, que sólo le dura 80 minutos). Apasionado por los números, el profesor se irá encariñando con la asistenta y su hijo de 10 años, al que bautiza «Root» («Raíz Cuadrada» en inglés) y con quien comparte la pasión por el béisbol, hasta que se fragua entre ellos una verdadera historia de amor, amistad y transmisión del saber, no sólo matemático… (Sinopsis de la editorial)
La fórmula favorita del profesor del título es esa que aparece en la portada del libro. Porque el protagonista de la novela es un viejo profesor, al que desde que hace diez años tuvo un accidente de coche la memoria únicamente le dura 80 minutos; tan sólo recuerda su vida anterior a ese accidente y lo que le sucede dentro de los últimos 80 minutos de su vida.
A la casa del profesor llega una asistenta, un tanto asustada por el carácter extraño de este personaje, pero que poco a poco establece una bonita amistad con el anciano, proceso que la autora nos explica con una prosa sencilla pero muy evocadora. Esta amistad progresa especialmente cuando el hijo de la asistenta empieza a acudir a casa del profesor: éste acoge al niño con gran cariño, y juntos disfrutan de tardes llenas de problemas matemáticos y retransmisiones radiofónicas de béisbol.
Son únicamente tres los personajes principales de esta historia, apenas hay otros escenarios aparte de la casa del profesor, y pocas son las cosas que suceden en ella. El ritmo es muy pausado pero la narración nos arrastra y nos conmueve. Aunque los personajes nunca expresan verbalmente sus sentimientos (como suele ocurrir en la cultura japonesa), el cariño y la unión que surge entre ellos es prácticamente palpable.
Es muy emotivo ver cómo el profesor, a pesar de su gran inteligencia y lo importante que debió ser antes de su accidente, tiene que preguntarle todos los días quién es a su asistenta, y llena su traje de notas llenas de las cosas que debería recordar. A pesar de ello, su amor por las matemáticas sigue intacto y se lo traspasa a la mujer y a su hijo, que empiezan a pensar en los números primos, en las series y en los problemas matemáticos como algo muy agradable que se convierte en el nexo de unión entre los tres.
Yoko Ogawa |
En definitiva, La fórmula preferida del profesor es un libro que aunque es muy pausado se lee rápidamente, porque su prosa es fácil de seguir y tiene abundantes diálogos. La relación de los personajes es conmovedora, y entran ganas de achuchar a ese viejo profesor que, a pesar de no tener memoria, es capaz de transmitir todo su amor y sus conocimientos.
Al parecer existe una película basada en este libro, aunque no ha sido estrenada en España. Os dejo el cartel por si queréis investigar para conseguirla. Yo también lo haré, porque tengo curiosidad de ver cómo se ha trasladado la historia del profesor a la gran pantalla.
Lo leí hace ya tiempo y me gustó mucho. Es el libro que más me ha gustado de la autora. Lo que sí te aseguro es que sus historias no te dejan indiferente.
ResponderEliminarBesotes!!!
¡Hola!
ResponderEliminarEl año pasado leí dos libros de la autora y tengo muchas ganas de seguir leyéndola, tengo claro que el próximo será este. Te entiendo perfectamente cuando hablas del tema del beisbol, me ocurrió con el libro 'El lado bueno de las cosas' pero en este caso con el fútbol americano. Se centraba demasiado en el fútbol americano y eso para mi fue un punto negativo.
No sabía que había película de esta novela, de todas formas a lo largo de este año pretendo leer el libro y luego ya me animaré con la adaptación.
Un beso
Justo vengo de casa de Reportera Literaria que reseña hoy esta misma novela. Completamente de acuerdo con vosotras, es una lectura maravillosa, impregnada de ternura, de nostalgia y de sencillez luminosa. Aunque entiendo que la cuñada y el beisbol no acabasen de convencerte.
ResponderEliminarPero si te ha gustado Ogawa, te recomiendo mucho otra de sus novelas: "La niña que iba en hipopótamo a la escuela", creo que te encantará. "La fórmula preferida del profesor" y "La niña que iba en hipopótamo a la escuela" son las dos novelas más occidentales de Yoko Ogawa y por eso han tenido tanto éxito fuera de Japón, dicen los experto que el resto de su bibliografía no resulta tan atractiva para los europeos porque es demasiado japonesa. Bss
Tengo muchas ganas de leer a Ogawa, a ver si me pongo!
ResponderEliminarBesotes
Lo leí hace unos años y me gustó mucho
ResponderEliminarBesos
Vaya, no lo conocía, pero me parece original, un auténtico drama para el que le suceda algo parecido. Como tú, también me quedo frío cuando me hablan de deportes, es un tema que me aburre profundamente. De todas formas, a pesar de este pequeño "pero", pinta muy bien el libro, sobre todo por esos personajes tan especiales.
ResponderEliminarUn beso ;)
La trama es tentadora pero no sé si me decidiré. Tengo un problema de conexión con la literatura oriental. Su prosa me parece muy cuidada y me transmite mucha calma pero por otra parte siempre hay algo que no me deja conectar del todo con la historia. De momento lo voy a dejar pasar.
ResponderEliminarBesos
¡Hola!
ResponderEliminarFue el primer libro que leí de la autora y me encantó. (Luego leí otro que no me gustó tanto, pero bueno). Lo que más me gusta es ese ritmo pausado, el hecho de que toda la historia pase dentro de la casa del profesor y que así veamos como una especie de paraíso para la mujer y el hijo, como una frontera que separa el ambiente tranquilo con la ciudad estresante.
Bueno, me alegro que hayas probado a leer esta autora, es una pasada. Espero que te animes con otros libros (El embarazo de mi hermana me han dicho que está muy bien, aunque aún no he podido leerlo).
¡Un beso!